domingo, 8 de abril de 2012

1955: Lágrimas en el Nacional.

Campeonato Sudamericano Chile 1955

                La quinta ocasión en que nuestro país albergó un Campeonato Sudamericano tuvo como gran novedad el retorno a estas justas de Argentina, ausente hace 8 años por la sangría en que se encontraba su torneo producto del éxodo masivo de jugadores a Colombia. Para ello, alineó ofensivamente a la delantera completa de Independiente: Michelli, Cecconatto, Bonelli, Grillo y Cruz. Y el poderío albiceleste se vería en jaque precisamente por los nacionales, donde asomaba en el arco Misael Escuti, como el relevo natural de Sergio Livingstone, por entonces con 35 años. Además, la presencia de los hermanos Robledo, y la enorme calidad de Cua Cuá Hormazábal, auguraban un torneo de excelencia, complementado con la presencia de Uruguay, campeón del mundo cinco años antes.
                El desarrollo del torneo mantiene algunas lógicas: el debut ante Ecuador anota un expresivo 7-1, con lo cual comenzaba a construirse el ataque más efectivo del torneo. En la segunda fecha, y con arbitraje de Mr. Dykes, de Inglaterra (una constante de esos años), se derrotaba por 5-4 a Perú, mientras Uruguay (con Máspoli, Tejera, Miguez, entre otros) debutaba con un 3-1 ante Paraguay. Así, el torneo decantaba hacia el favoritismo de los locales, junto a Argentina y los uruguayos; sin embargo, será Perú quien cierre el podio finalmente. Las ilusiones nacionales aumentan con el 5-0 frente a los guaraníes: 19 goles en 4 partidos es una carta de presentación más que clara para optar al título continental. Así, y mientras Argentina avanza cómodamente, consagrando a Rodolfo Michelli como gran figura de su combinado; la opinión pública consagra a nuestra selección: “Chile ya ganó”. La tarde del 30 de marzo de 1955, ante 52.600 personas, aproximadamente, se juega como plato de fondo la final del campeonato (en el preliminar, Perú asegura el bronce al vencer a Uruguay 2-1). Y la constante de tantas veces se hace presente: dominio intrascendente, que hace ver permeable al bloquie defensivo argentino (comandado por Dellacha). Meléndez y Robledo no aparecen como los fenomenales de fechas anteriores. Por el contrario, el control de las acciones recae en Ángel Labruna, exquisito conductor albiceleste. Hasta que llega el minuto 60’… Pase profundo de Balay a Angelito, que remata casi encima de Escuti. Rechazo del arquero y aparición de Michelli.
Gol.
 Y afuera, tragedia. La ansiedad por ingresar al estadio provoca una avalancha humana que cobra la vida de 6 personas, dejando a 13 gravemente heridas. El subcampeonato sudamericano pasa a segundo plano. Se llora a las víctimas de las desmedidas “ansias de lucro” de la Asociación. Los 700 carabineros apostados no fueron capaces de frenar a la multitud ávida por un título. Finalmente, queda el consuelo de consagrar a Enrique Hormazábal como el mejor jugador del Campeonato, y de comenzar a germinar, quizás sin proponérselo, el plan que llevaría a la extraordinaria campaña del Mundial de 1962.

@puertomontt25

lunes, 2 de abril de 2012

Los leones de Bielsa: los jugadores del Athletic

Los leones de Bielsa
Presentamos la info de los 11 jugadores con más minutos en la campaña del Athletic 2011-2012, que está haciendo historia en el fútbol europeo. Aquí, los soldados:

GORKA IRAIZOZ
Es uno de los 5 jugadores con los 2.700 minutos de torneo disputados. Arquero de 31 años, con pasado en las filiales del Athletic y Espanyol, debutó oficialmente el año 2004 en la Segunda División, con la camiseta del Eibar. Luego de disputar 23 partidos en la categoría, retornó al Espanyol para hacerse rápidamente con la titularidad. En su primera temporada, se alzó con la Copa del Rey. Su segunda temporada no sería tan positiva, dado que debió ceder su lugar al camerunés Kameni. Sin embargo, tuvo el orgullo de disputar la final de la Copa UEFA, que perdieron ante Sevilla. Para la temporada 2007-08 es transferido al Athletic Club, donde alterna titularidad con Armando. Sin embargo, a partir de la segunda temporada, es titular indiscutido en la valla vasca, hasta los días de hoy. Con este equipo, ya logró llegar a una final de Copa, siendo uno de los que se repetirán el plato el 25 de Mayo. Tiene 177 partidos jugados en liga y 36 en torneos internacionales. Nunca ha jugado por la Selección Española este arquero nacido en Pamplona.



ANDONI IRAOLA
Este lateral bilbaíno ha desarrollado toda su carrera en el Athletic. Con pasos en las filiales del Baskonia y Bilbao Athletic, es uno de los puestos fijos en los últimos años en la oncena del equipo vasco. Ha incluido partidos en la Selección, llegando a disputar eliminatorias de Eurocopa y Mundial. En su extensa carrera, sufrió su primera expulsión recién en el mes de Marzo. Desde la temporada 2003-04, este nacido en Usúrbil nunca ha faltado a la cita del gol, sumando ya 31 goles en 307 partidos jugados en Primera División. Es el jugador con más partidos dentro del plantel, siendo el 14° en la lista histórica del club en primera división.



JAVI MARTÍNEZ
Nacido en Navarra, este polifuncional jugador ha jugado profesionalmente siempre en el Athletic de Bilbao. Luego de pasar por varios equipos menores, el último la filial del Osasuna, el año 2006 es contratado por el equipo rojiblanco. Desde su llegada, siempre se ha mantenido en la titularidad lo que, sumado a su jerarquía, le ha posibilitado vestir la camiseta de la Selección española. Con esta, fue uno de los 23 jugadores que integró el equipo campeón del mundo en Sudáfrica 2010, disputando algunos minutos ante Chile en la fase grupal. El año pasado fue una de las figuras de la Eurocopa  Sub-21, donde España se alzó con el torneo obteniendo boletos para los Juego Olímpicos de Londres. Con tan solo 23 años, está a punto de llegar a su partido 200 en Primera División, donde ha convertido 22 anotaciones.  



FERNANDO AMOREBIETA
Este defensa ha jugado toda su vida en el Athletic. Nacido en Venezuela, pertenece al reducido grupo de jugadores que han vestido la camiseta rojiblanca, sin haber nacido en suelo español (Lizarazu, Ortúzar, entre otros). Debutó en la temporada 2005-2006, y desde ahí nunca ha bajado de los 20 partidos por liga. Ha disputado 178 partidos en primera división, llegando a la red sólo en tres ocasiones. Optó jugar por el combinado vinotinto, a pesar de tener pasado en las selecciones menores de la selección española.



JON AURTENETXE
Con sólo 20 años es uno de los más jóvenes del plantel. Iniciado como central devenido en lateral por la izquierda, este zornotzarra debutó oficialmente ante el Werder Bremen por la Europa League en San Mamés, con tan sólo 17 años. En la temporada 2010-2011 alternó en algunos partidos en la primera división (sufriría una grave lesión), para luego ser uno de los inamovibles en la campaña de Bielsa. Ya se dio el gusto de anotar, en el partido ante Racing en Bilbao y ante PSG en Francia. Ganó la Eurocopa Sub-21 del año pasado, esperando participar en los Juegos Olímpicos de Londres. Se espera que este vasco pueda ser la solución al punto flaco de la selección española en algunos años.



ANDER ITURRASPE
Este mediocampista de 23 años ha sido siempre parte del Athletic. Apodado “El maquinista”, luego de realizar las juveniles en el conjunto rojiblanco, debutó el año 2008 en el primer equipo en cancha del Málaga. En las dos temporadas siguientes alternó en la titularidad, para hacer un puesto definitivo en la presente campaña. Lleva 64 partidos jugados en primera división, anotando sólo un gol (el primero de la Era Bielsa). Formó parte del combinado Sub-21 que se alzó con la Eurocopa 2011.



ÓSCAR DE MARCOS
Otro de los valores jóvenes del equipo vasco. Polifuncional como varios, la llegada del argentino lo ubicó como uno de los inamovibles. Nacido en Alava, tuvo un paso por el Alavés, donde descendió a la tercera categoría. A pesar del mal precedente, fue contratado por el Athletic Club, donde alternó titularidad en sus dos primeras temporadas. Sin embargo, en la presente liga es el cuarto jugador con más minutos en cancha. Tiene 59 partidos jugados en primera, con 5 goles convertidos. En Europa League, su promedio es mejor: 4 goles en 16 cotejos. También es otro de los que espera su participación en los Juegos Olímpicos de Londres.



ANDER HERRERA
Centrocampista nacido en Bilbao. Con tan sólo 22 años, realizó todas las divisiones menores en el Real Zaragoza, donde llegó a debutar en primera el año 2009 (ya había jugado en la campaña anterior en el ascenso). Con dos grandes temporadas en el conjunto aragonés, fue transferido al Athletic para la presente liga. Acumula 88 partidos en primera división, con 5 goles. A nivel internacional, registra 9 duelos con un gol. Fue uno de los puntales en el título Sub-21 español en la Eurocopa, y se apronta a jugar los Juegos Olímpicos.



MARKEL SUSAETA
Extremo en el esquema de Marcelo Bielsa, ha realizado toda su carrera en el equipo de Bilbao. Debutó en primera división en 2007, logrando anotar en sus primeros dos partidos (el primero de ellos nada menos que en Camp Nou). A sus 25 años, acumula 155 partidos en primera división, con 15 goles. A nivel europeo, 2 tantos en 11 juegos. Siempre ha sido titular desde su debut. El nacido en Eibar es una de las piezas fundamentales del técnico argentino.



FERNANDO LLORENTE
El goleador indiscutido del plantel ya tiene 27 años. Ídolo total en Bilbao, ha desarrollado toda su carrera en el Athletic, donde logró debutar en primera división en Enero de 2007. En liga, lleva a su haber 229 juegos con 76 dianas. A nivel europeo, ha disputado 19 encuentros, con 12 goles. A pesar de un inicio fulgurante, sólo a partir del 2007 pudo consolidarse como el delantero goleador del Athetic, lo que incluso le ha valido se convocado a la selección española. Debutó el 2008 ante Chile, dirigido casualmente por Marcelo Bielsa. Formó parte del equipo campeón en Sudáfrica 2010, disputando algunos minutos ante Portugal. Por otro lado, ya es el goleador histórico del equipo rojiblanco en competencias internacionales, dejando en el camino a leyendas vascas. Ante la lesión de Villa y el irregular momento de Torres, es una de las esperanzas de gol de los campeones del mundo.



IKER MUNIAN
Aún no ha cumplido dos décadas de vida y ‘Bart Simpson’ es toda una estrella en Bilbao. Dueño de un futuro tremendo, Muniain es uno de los fijos en el equipo de Bielsa, siendo el jugador de campo con más minutos disputados en la presente liga. Nacido en Pamplona, debutó en primera con el Athletic en Julio de 2009, nada menos que en la UEFA Europa League. Ya tiene 90 partidos en primera división, con 11 tantos. A nivel internacional, lleva 18 partidos, anotando en un tercio de ellos. Además, ya tuvo el gusto de debutar en la selección mayor en un amistoso ante Venezuela. También espera disputar los Juegos Olímpicos de Londres 2012.


Estos son los 11 jugadores con más minutos en la 'Era Bielsa'. A continuación, los otros jugadores que se han utilizado:
Mikel San José
Gaizka Toquero
Iñigo Pérez
Ekiza
Igor Gabilondo
Carlos Gurpegi
David López
Ibai Gómez
Igor Martínez
Ramalho
Raúñ
Galarreta

Por Luis A.

miércoles, 28 de marzo de 2012

1945: Medina hace los goles; Livingstone los evita.


                Hacia 1945, nuestro fútbol ya había transitado una década por el profesionalismo. Era el soporte anímico fundamental para una actividad que buscaba consolidarse internamente, mientras nuestros representativos seguían siendo vapuleados cada vez que un equipo foráneo aparecía como visita. A pesar de esos desafortunados resultados; nuestros dirigentes se lanzaron en 1944 con la idea de organizar, a inicios de 1945, el Campeonato Sudamericano Extraordinario de Fútbol. Así, y mientras en la interna de nuestro balompié se discute a Francisco Platko (seleccionador nacional, de nacionalidad húngara) debido a que sus tácticas no encuentran resultado en la cancha, comienzan a llegar las delegaciones que animarán el torneo. Por primera vez se reunían siete equipos. Colombia reemplazaba a Perú. ¿El debut? Un claro 6-3 sobre Ecuador (el más débil de la pizarra), que no da para ilusiones reales, puesto que las diferencias entre uno y otro eran asombrosas. Las siguientes victorias (ante Bolivia -5-0- y Colombia -2-0-) no responden la pregunta del verdadero nivel de nuestro seleccionado. Los últimos 3 juegos, ante los grandes del Atlántico, servirían para cuantificar la real valía de un equipo que en sus 3 primeros partidos ha convertido 13 goles y tiene en Alcántara, Clavero y Medina sus principales credenciales de ataque (han señalado 10 de los 13 goles). Con el enorme Livingstone en el arco; la selección se apresta a enfrentar a Argentina. Y será Medina (otra vez) quien haga explotar a los 70 mil asistentes al Nacional, cuando a los 2 minutos del primer tiempo señale el uno a cero. La ventaja será sostenida de manera heroica hasta los 68 minutos, cuando el gran “Tucho” Méndez consiga el empate. Al final, un inolvidable empate que abría el apetito de discutir el tercer lugar (e incluso el segundo, o hasta el título, si se daban las combinaciones matemáticas). La penúltima fecha, ante el Uruguay de Máspoli, regala una de las mayores alegrías en la década futbolera: 1-0, con gol de Medina, otra vez. Y a esperar en el cierre a Brasil, con la opción cierta de poder discutir el título, o al menos de igualar a Argentina con 11 puntos. Sin embargo, el gol de Heleno, en el cierre del torneo, dejó a nuestro seleccionado en el tercer lugar, detrás de 2 selecciones que traían delanteras espectaculares: Argentina (Boyé, Méndez, Pontoni, Martino y Lostau) y Brasil (Tesourinha, Zizinho, Heleno, Jair y Ademir).
            Con el tiempo, el Sudamericano Extraordinario de 1945 fue recordado como uno de los mejores en cuanto a técnica demostrada, con 89 goles en 21 partidos, con un Uruguay que empezaba a configurar el equipo que llegaría a la cima del mundial en 1950, con Colombia, que iniciaba su andar por pastos sudamericanos, y por nuestros héroes: Livingstone y Medina; cada uno en lo suyo.
@puertomontt25

Sudamericano de 1941: Estrellas en el Nacional

           La edición de 1941 correspondió a un Campeonato Sudamericano Extraordinario, celebrado en honor del cuarto centenario de la fundación de Santiago. Y para estar a la altura de tan magno acontecimiento, se presentó al continente el Estadio Nacional, impactante escenario inaugurado a fines de 1938, y que se transformaría en un referente para eventos deportivos, políticos y musicales. Cinco equipos se hicieron presentes: Argentina, Uruguay, Perú, Ecuador y los dueños de casa; que presentaban a Máximo Garay como DT. Además, el evento ofrecería una selección de jugadores emblemáticos que darían un espectacular realce al torneo. A saber: “Lolo” Fernández, de Perú; Schubbert Gambetta y Obdulio Varela, de Uruguay; Sergio Livingstone y Raul Toro, de Chile;  y la constelación argentina: Adolfo Pedernera, Enrique García, Antonio Sastre,  Juan Marvezzi (goleador del certamen con 5 tantos), y el inolvidable José Manuel “Charro” Moreno.
            En lo organizacional, nuevamente el torneo transita por la incertidumbre de generar los 2 millones de pesos que cuesta la realización. Incluso una anecdótica colecta en una cena de la Asociación Central y la Federación de Fútbol, alcanza a reunir 65 mil pesos que se ponen a disposición de la organización. Por su parte, la concentración de los seleccionados se vuelve tediosa y se debe recurrir a estrategias poco convencionales (incluso paseos al litoral) para lograr mantener el ánimo intacto en los jugadores.
            El torneo comenzó el 2 de febrero de 1941; y ante cerca de 40 mil personas, el Estadio Nacional sirve de escenario para la primera goleada: 5-0 sobre Ecuador (Sorrel -2-, Toro, Arancibia y Contreras). La actuación entusiasma, y motiva un lleno siete días después, para dar cuenta de Perú por 1-0. La explicación de tan macizas actuaciones se resume en 3 nombres: Livingstone, Roa y Vidal, quienes se convierten en soportes de una ilusión que alcanza incluso, para creer en un triple empate en el primer lugar, si se le gana a Argentina en el cierre del torneo, puesto que Uruguay vence a Chile en la tercera fecha (2-0) y los mismos charrúas caen ante los trasandinos por 1-0. Así, el 4 de marzo de 1941 y ante 70 mil personas (misma cantidad de público que llega al partido ante Uruguay) se juega el mejor partido del campeonato, en el cual el Sapo se consagra a nivel continental (“Livingstone: eminente… el mejor guardapalos del campeonato” rezan unos títulos; “Roa: un monumento; Vidal: a la altura de su compañero…” se lee en otros).
            Finalmente; el torneo se cierra con el triunfo argentino; invicto en 4 juegos, aunque ya no con tanta holgura: sólo 10 goles en 4 encuentros. Chile cerrará el podio, tras los uruguayos; que celebran la organización del campeonato; engrandecida por la majestuosidad del recinto ñuñoíno. En el tema de las platas, también hubo sonrisas; se logró una utilidad de 400 mil pesos que permitieron a la Federación de Football adquirir una casa.
            Se abría así una de las décadas más difíciles en la organización de los Sudamericanos, que aunque verían la aparición de nuevos referentes, y el récord de 7 países participando (1942) sentirían a Europa desangrada por la guerra, primero; y angustiada por la reconstrucción, después. Chile demostraría estar a la altura de los países del Atlántico, en cuanto a ser un dignísimo anfitrión, y se repetiría el gusto rápidamente, en 1945, donde Sergio Livingstone encontraría a su escudero ideal: Desiderio Medina.

@puertomontt25
            

martes, 27 de marzo de 2012

1926: Goles, Triunfos, David y un Manco

El Sudamericano de fútbol regresa a Chile en 1926. Muchas cosas habían cambiado desde la primera vez, en 1920. El fútbol se había posicionado con propiedad en nuestra sociedad, aprovechando 2 fenómenos que sacudirían el panorama desde 1925: El nacimiento de Colo Colo y la visita a Chile del RCD Espanyol, primer visitante europeo que llegaba, con el Divino Zamora incluido, a disputar sendos partidos al país (triunfos de los combinados nacionales por 4-3 y 4-2). Otra novedad sería el cambio de sede, que pasaría desde el Sporting Club de Viña (en 1920) a los míticos Campos Sports de Ñuñoa, donde años más tarde se alzaría el Estadio Nacional. Y si bien se lamentó la ausencia de Brasil en la cita; en su lugar asomaba Paraguay, quien ampliaba el espectro de países participantes en los Sudamericanos (a 6). Finalmente, el torneo sería disputado por Uruguay, Argentina, Bolivia, Chile y los citados guaraníes.
La selección, bajo el mando de José Rosseti, que concentra al equipo por 61 días en El Llano, se aprontaría a mostrar enormes avances en el desarrollo del certamen, merced a la presencia de David Arellano, reconocido como uno de los primeros jugadores.entrenadores, de esos que mandan en la cancha; sin embargo, la figura indiscutible sería Héctor Castro, el "Manco", que había perdido una mano en un accidente, y que luego sería parte del plantel campeón del mundo: el charrúa convertirá 6 de los 17 goles de su equipo, que se alzará con el título de manera invicta.
¿Y Chile? Pasado el susto inicial del debut ante Bolivia, que abre la cuenta tras anotación de Aguilar, reacciona furiosamente hasta configurar un rotundo 7-1, con 4 goles de Arellano. La segunda fecha pondría las cosas en orden (1-3 ante Uruguay, gol de Subiabre). Así, mientras el torneo acumulaba una enorme cantidad de goles (32 en los 5 primeros juegos), nuestro seleccionado veía la posibilidad de discutir el subcampeonato con Argentina, por lo que el partido del 31 de octubre ante los trasandinos, se disputa de manera poco vista en nuestros jugadores: se consigue un heroico empate en un gol, por lo que un triunfo ante Paraguay en el cierre del certamen, permitiría empatar en el segundo lugar con Argentina. Sólo la cantidad de goles en contra de los nacionales (6 frente a 3 de los argentinos), permite diferenciar los guarismos finales; pero nadie repara en eso, queda la satisfacción de logros inéditos para nuestro fútbol: se consiguen  los 2 primeros triunfos a nivel sudamericano -oficial-; se cuenta con el goleador del torneo (Arellano con 7 goles) y se obtiene un -compartido- subcampeonato. En suma, sólo buenas noticias; a las que se sumará el reconocimiento, en diciembre de 1926, por parte de la FIFA hacia la Federación de Football de Chile. A eso se agrega que el torneo marcó un record de 55 goles anotados en 10 juegos (5,5 goles por partido). Además, permitió observar en acción a enormes figuras del fútbol sudamericano (y mundial) como Héctor Scarone, José Nasazzi y el citado Castro en Uruguay o Roberto Cherro y Vaccaro en Argentina.
Por último, los comentarios que venían desde el otro lado de la cordillera muestran grandes diferencias con lo que se decía hace 6 años de nuestra selección: "el eleven actual de Chile ya no es la murga aquella que cumplía sin pena ni gloria su misión de correr la liebre en los partidos y de comer la cola en el cómputo final del campeonato". Sin duda, meritorio. Y habría más. La Gira de Colo Colo, la participación en los juegos olímpicos de Amsterdam y la presentación en el Primer Campeonato Mundial de Fútbol, en Uruguay, mostrarían renovados aires para nuestro balompié.

@puertomontt25

domingo, 25 de marzo de 2012

CAMPEONATO SUDAMERICANO DE 1920: LA PRIMERA VEZ EN CASA


                El debut de Chile en materia de organizar un Campeonato Sudamericano, estuvo rodeado de muchos detalles anecdóticos, muy propio de un país que por esos días miraba desde abajo el progreso de los vecinos rioplatenses. La primera gran novedad es la contratación de Juan Carlos Bertone, entrenador uruguayo, quien fuera traído por la Asociación de Football de Chile con la misión de abandonar el último lugar, “privilegio” exclusivo de la Selección en los 3 torneos precedentes. La otra gran novedad es que al no contar Santiago con un recinto de categoría para albergar el torneo, se recurre al Valparaíso Sporting Club de Viña del Mar como sede del cuadrangular subcontinental. ¿Otras “perlitas”? El financiamiento del torneo se logra con el apoyo de la población, ya que de los $260.000 necesarios, el Estado sólo aporta con $100.000, viéndose obligado el Comercio de la zona y el público en general a solventar los recursos faltantes. ¿Más? La delegación uruguaya, exige el pago de los viáticos en gramos oro, a fin de asegurar su exclusiva presencia en el Campeonato. Otra novedad la constituye la conformación de la Selección, que recurre en gran parte a jugadores de la –hoy- octava región, principal animador de los Campeonatos Nacionales de la época. Volviendo a Bertone, éste implanta un férreo régimen de preparación, donde aparece por vez primera la palabra concentración, que no es resistida por algunos jugadores; incluso, por llegar tarde a un entrenamiento, son desafectados los jugadores Díaz y Báez; mientras que el mítico Maestro Guerrero señala “El entrenamiento que nos ha hecho el señor Bertone en primer lugar nos ha puesto como pluma para correr, ya ve usted que estoy flaquito”. Sin duda, el ánimo y la expectación eran desbordantes, y la prensa llamaba a los dueños de tiendas y almacenes a cerrar temprano los días de partidos, a fin de asegurar un lleno en el Sporting.
                Sobre los ilustres invitados (Argentina, Brasil y Uruguay), habrá que resaltar la figura de José Piendibene, el “Maestro” uruguayo, proveniente de Peñarol. Brasil, campeón en 1919, sólo mantiene un jugador de ese plantel, y mostrará en cancha un desorden que se proyecta desde su orgánica institucional. ¿Y Argentina? Trae a insignes como su arquero Tesorieri y a su goleador Libonatti.
                El desarrollo del torneo, disputado entre el 11 de septiembre y el 3 de octubre, estará marcado por la gran presencia de público. Se registran cerca de 94 mil personas en las seis jornadas del campeonato. El debut de Chile es ante Brasil, y se cae ajustadamente por 0-1. Sin duda, un valioso score, considerando que en los dos torneos anteriores, nuestra selección había cosechado once goles en contra ante los brasileños. Nace también el concepto del “triunfo moral” puesto que la exclusiva conquista del partido nace de un error de Unzaga, quien trata de ceder el balón al arquero (Guerrero); sin embargo, su intento termina en un desafortunado autogol.
Mientras, en el partido con más público del campeonato (20.000 aprox.), uruguayos y argentinos igualan en un tanto. Pero la gran sorpresa vendría para Chile en su segundo juego, ante Argentina. Un gran empate 1-1, con gol anulado incluido –en favor de Chile- instala la decepción en la parcialidad chilena, que carga todas las culpas en el juez Di María, brasileño. En la cuarta fecha, Uruguay destroza 6-0 a Brasil y depende de sí mismo para campeonar, precisamente ante Chile, en el cierre del campeonato.
La penúltima fecha confirma a Argentina como potencia regional, al vencer 2-0 a Brasil, relegándolo al tercer lugar. Chile cerrará su participación en el Sudamericano cayendo 1-2 ante Uruguay, que se queda con el título. El gol de Bolados no bastará ante la eficacia charrúa, que cuenta en Ángel Romano a otra figura de excepción, que por esos tiempos ya jugaba en Boca Juniors de Argentina y que fue uno de los referentes de la selección, incluso a nivel olímpico.
Las conclusiones del torneo para Chile son realistas: desde Argentina se pregona que el fútbol mostrado por los nacionales era el demostrado en Buenos Aires hace 10 años o más, abusando del uso del cuerpo. Bertone, por su parte, es alzado como un gran estratega, y se le ofrecen las comodidades necesarias para proyectar su cargo como Instructor, Director y Asesor de la Asociación de Football. Las arcas también sonríen, con un superávit de más de $3.300. En lo netamente estadístico, se habían recortado las vergonzosas diferencias de torneos pasados, y quedaba la sensación de que se avanzaba, aunque habría que esperar 6 años más, en un nuevo torneo organizado en casa, para lograr el primer triunfo en un Sudamericano.

sábado, 10 de marzo de 2012

Criciuma 1992: el primer equipo de Segunda División en Copa Libertadores

El Criciuma Esporte Clube es uno de los animadores del Campeonato Catarinense, torneo estadual del distrito de Santa Catarina, al sur de Brasil. Fundado en 1947, el Criciuma se tituló 5 veces en este campeonato hasta 1991, opacado en cierta forma por el poderío de Joinville, Figueirense y Avaí, los poderosos catarinenses. En el campeonato brasileño de primera división, en tanto, sólo había participado en 4 ediciones, con un meritorio sexto lugar en 1987. Este pequeño equipo brasileño, desconocido para muchos, tuvo que disputar la segunda categoría a partir de 1989, sin grandes resultados. Esto hasta que vino la etapa gloriosa del club, iniciándose en la novel Copa de Brasil. Inaugurada en 1989, el Tigre, como es conocido el equipo, participó por primera vez al año siguiente, donde sorpresivamente llegó a semifinales, siendo eliminados por Goiás. Sin embargo, el torneo de 1991 sería el de su consagración. De la mano de Felipao, Luiz Felipe Scolari, eliminó seguidamente a Ubiratan, Atlético Mineiro, Goiás y Remo, para llegar a la mismísima final ante el poderoso Gremio de Porto Alegre. El, en ese momento, bicampeón catarinense, debió disputar la ida en el campo de Gremio, obteniendo un valioso empate a un tanto gracias al gol de Vilmar. La igualdad en blanco en el Heriberto Hulse de Criciuma el 02 de Junio, le dio más valor a ese tanto en Porto Alegre lo que se tradujo en el título más importante para este pequeño club. Además, el premio y el orgullo de representar a Brasil en la próxima edición de la Copa Libertadores, transformándose el Criciuma, en el primer equipo en disputar el torneo sin pertenecer a la primera división. En su campaña en la Serie B, en tanto, culminó en el lugar 35.



Con la ciudad revolucionada, Criciuma se aprontaba para su primera experiencia internacional. Disputaría el grupo ante Sao Paulo, campeón de la Serie A, y los bolivianos de San José y Bolívar. En el banco, Levir Culpi volvía al club para suceder a Felipao que partía a Medio Oriente. En el plantel, en tanto, las piezas no diferían mucho del año anterior. Alexandre en el pórtico; Sarandí, Vilmar, Altair e Itá en la clásica línea de cuatro brasileña; Gelson, Roberto Cavalo y Grizzo en el mediocampo, para dejar en el ataque a Soares, Jairo Lenzi y la figura Venderlei Mior. Debutaría ante el campeón brasileño el 6 de Marzo, en el Heriberto Hulse. Contra todo pronóstico, el Tigre le dio un toque a Sao Paulo, obteniendo un histórico 3-0 en su presentación internacional, con tantos de Jairo Lenzi, Gelson y Adilson.



Luego vendría el periplo boliviano, donde rescataría otros buenos resultados. En Oruro vencería por 1-2 a San José, gracias a las conquistas de Gelson y Jairo Lenzi. Tres días después, conseguiría un valioso empate en un tanto ante el Bolívar en La Paz. Jairo Lenzi anotaba por tercer partido consecutivo, esta vez con una gran definición. Luego, el 1 de Abril era el turno de visitar a Sao Paulo en su recinto, haciendo gala éste de su jerarquía humillando por 4-0 a Criciuma, con gran actuación de Raí y Müller. No obstante, esta derrota no amilanó al equipo y pudo vencer con autoridad en su ciudad a los equipos bolivianos. Primero, ante San José (que había rescatado un empate en Sao Paulo), cuajó una noche soñada, goleando por 5-0, con anotaciones de Jairo Lenzi, Everaldo (2), Emerson y Adilon Gomes. A la semana siguiente, venció ajustadamente al Bolívar por 2-1, con goles de Roberto Cavalo y Grizzo, para sellar una primera fase de ensueño, quedándose con la punta del grupo.



En octavos de final se mediría ante el Sporting Cristal, uno de los grandes de Perú. El partido de ida, jugado en Lima, confirmó el buen juego del Tigre. Logró un histórico 1-2, gracias a los tantos de Everaldo y Jairo Lenzi. La vuelta, en Criciuma, fue triunfo por 3-2, con anotaciones de Vilson, Gelson y Everaldo. Con puntaje perfecto, el equipo seguía haciendo historia avanzando a cuartos de final. Como Sao Paulo también lo hizo, debieron medirse nuevamente en esa instancia. En una llave sumamente pareja, la suerte fue paulista. En la ida, jugada en Morumbí, el triunfo fue local debido al solitario gol de Macedo. En la vuelta jugada el 20 de Mayo, el empate a un gol, con tantos de Soares y Raí, le dio el pase a los dirigidos por Telé Santana. Un remate en el último suspiro de Roberto Cavalo en el travesaño de Zetti ahogó las esperanzas del Tigre. Sin embargo, la asistencia criciumense supo reconocer la valía y el esfuerzo de sus jugadores, despidiendo de pie a su equipo. El equipo de Santana, en tanto, se abría paso para lo que sería su primera Copa Libertadores, revalidada un año más tarde.



Posterior a esta experiencia, el mismo año Criciuma logró el ascenso a primera división, donde se mantuvo hasta 1997. Retornó en el 2003, para volver a descender al año siguiente. Luego, nunca volvería a la máxima categoría, incluyendo pasos por la tercera categoría brasileña. En la Copa de Brasil tampoco pudo revalidar laureles y nunca más volvería a una competición internacional. Sólo pudo obtener alegrías a nivel estadual, obteniendo los campeonatos de 1993, 1995, 1998 y 2005. Actualmente, el aurinegro, similar a los colores de Peñarol,  milita en la segunda categoría del balompié brasileño, buscando volver a las alegrías de los noventa.

Por Luis A.